Dolor lumbar: causas y tratamiento.

Dolor de espalda en la región lumbar en un hombre.

En la mayoría de los casos, el dolor lumbar es causado por hipotermia o distensión muscular debido a movimientos incómodos o levantamiento de objetos pesados y puede desaparecer por sí solo. Si el dolor altera el ritmo de vida normal, la mejora no se produce durante demasiado tiempo o hay otros síntomas sospechosos, entonces el diagnóstico y tratamiento del dolor de espalda en la región lumbar debe confiarse a un médico.

Dependiendo de cuánto tiempo haya molestado el dolor al paciente, los médicos distinguen:

  1. dolor agudo - menos de 4 semanas,
  2. dolor subagudo: de 4 a 12 semanas,
  3. dolor crónico: más de 12 semanas.

En la cita, el médico aclara con el paciente exactamente cómo le duele la espalda: puede ser un dolor agudo en la zona lumbar al moverse, dolor periódico en la zona lumbar, dolor sordo constante, dolor punzante agudo y otras sensaciones desagradables de diversos grados. de intensidad. Según la duración, la ubicación y la naturaleza del dolor, el médico asume cuál es su origen.

Dolor en la columna lumbar: causas.

El dolor en la región lumbar puede estar asociado tanto con problemas de la columna como con otros órganos y sistemas del cuerpo. Para entender cómo curar la zona lumbar, es necesario determinar qué causa el dolor.

Existen dolores vertebrogénicos causados por enfermedades de la columna:

  • Osteocondrosis, que se manifiesta por problemas con los discos intervertebrales, facetas o articulaciones facetarias. Los trastornos ocurren con la edad en cualquier persona: los discos intervertebrales pierden humedad y elasticidad, las articulaciones facetarias se vuelven más densas y menos móviles.
  • Sobreesfuerzo de los músculos y ligamentos de la columna vertebral.
  • Compresión de las raíces de los nervios espinales: radiculopatías.
  • Lesión espinal.
  • Inestabilidad de la columna debido a debilidad del sistema ligamentoso-muscular.

Las causas no vertebrales incluyen:

  1. Desórdenes neurológicos

    • Las plexopatías lumbosacras son daños en el plexo nervioso que da origen a los nervios periféricos de las extremidades inferiores. Ocurre con lesiones y trastornos metabólicos.
    • La distonía es una violación del tono de los músculos que sostienen la columna. En este caso, el dolor puede ir acompañado de una mala postura. La enfermedad puede ser congénita.
  2. Enfermedades sistémicas

    • Infecciones que afectan a las vértebras, los discos, las membranas de la médula espinal o la propia médula espinal, por ejemplo, osteomielitis, absceso epidural.
    • Tumores malignos y benignos, metástasis.
    • La osteoporosis es una disminución de la densidad ósea esquelética, plagada de fracturas vertebrales.
    • Enfermedades reumatológicas, como espondiloartropatía inflamatoria o espondilitis anquilosante.
  3. Dolor de órganos internos.Es causada por causas fuera de la columna vertebral y se irradia hacia la zona lumbar, a veces en el medio, a veces hacia un lado, dependiendo del órgano de origen. Éstas incluyen:

    • Enfermedades del tracto gastrointestinal: con mayor frecuencia pancreatitis.
    • Enfermedades del sistema urinario: infecciones como pielonefritis y urolitiasis. Un dolor punzante paroxístico intenso en la espalda y el costado acompaña al cólico renal cuando el cálculo se mueve a lo largo del uréter.
    • El aneurisma aórtico es una patología rara y peligrosa en la que la pared de la arteria más grande del cuerpo forma un bulto. Esto puede provocar una sensación de pulsación en el abdomen.
    • Enfermedades de las articulaciones de la cadera: lesiones, inflamación, degeneración.
  4. dolor psicógeno

    El dolor lumbar puede estar asociado con un trastorno de ansiedad o depresión.

La lesión de la médula espinal o de las raíces espinales inferiores, llamada cola de caballo, es una emergencia médica. La compresión de estas estructuras puede deberse a:

  • hernia discal,
  • lesión,
  • tumor maligno o benigno,
  • infección.

La compresión de la médula espinal se acompaña de dolores de espalda bilaterales extremadamente intensos, debilidad muscular en las piernas, incluso parálisis, entumecimiento de las extremidades inferiores, incontinencia urinaria y fecal, por lo que es difícil confundirla con otras afecciones.

Síntomas

A menudo, el dolor lumbar es inespecífico, es decir, causado por trastornos musculoesqueléticos inofensivos. Los pacientes en este caso describen las siguientes quejas:

  • Dolor doloroso, tirante o opresivo.
  • La aparición o intensificación del dolor cuando una persona está de pie o sentada durante mucho tiempo, levanta algo pesado, realiza un trabajo físico con los brazos levantados, por ejemplo, colgar cortinas, cambiar las bombillas de una lámpara de araña, agacharse repetidamente y durante mucho tiempo: al lavar pisos, aspirar, quitar nieve.
  • Ningún otro síntoma.

El hecho de que el dolor pueda ser síntoma de alguna condición peligrosa lo indica"banderas rojas":

  • Edad mayor de 50 años. Este grupo de edad tiene un mayor riesgo de osteoporosis y tumores.
  • Dolor en reposo y por la noche, interfiriendo con el sueño. El dolor inespecífico suele aparecer con el movimiento o con una carga estática prolongada, pero desaparece tras descansar en una posición cómoda.
  • La debilidad general tampoco es característica del dolor inespecífico.
  • Pérdida de peso inexplicable en los últimos meses. Puede ser un signo de inflamación sistémica prolongada en el cuerpo causada por enfermedades autoinmunes y tumores.
  • Aumento de la temperatura corporal, escalofríos. Indica inflamación severa de diversos orígenes.
  • Disminución severa o creciente de la sensibilidad o debilidad en los músculos de las piernas.
  • Alteración de la función de la vejiga o los intestinos: deposiciones involuntarias o, por el contrario, retención urinaria o estreñimiento. Los nervios de las partes inferiores de la médula espinal van a los órganos pélvicos y a las extremidades inferiores. Contienen fibras tanto sensoriales como motoras. La pérdida de sensación o movimiento combinada con dolor agudo es un signo de compresión de un nervio y posiblemente de la médula espinal. Si esta situación no es tratada por un médico, la función del nervio o parte de la médula espinal puede perderse para siempre.
  • Falta de efecto del tratamiento y transición del dolor agudo a crónico.
  • Características de la historia clínica. Por ejemplo, si el dolor lumbar apareció en un paciente con un diagnóstico previamente establecido de osteoporosis o un tumor maligno. No importa cuánto tiempo hace que se hizo el diagnóstico. O ha aparecido dolor en una persona que ha sufrido recientemente una infección grave, una cirugía o que tiene un sistema inmunológico muy reducido por cualquier motivo, por ejemplo, ha estado tomando un glucocorticoide durante mucho tiempo o tiene una diabetes mal controlada. En estos casos, el dolor lumbar puede indicar diversas complicaciones.

Si ha identificado al menos uno de los puntos enumerados, consulte inmediatamente a un médico para un examen adicional.

Diagnóstico

El dolor es un síntoma subjetivo, por lo que el examen y el examen realizado por un médico desempeñan un papel muy importante en el diagnóstico. El médico prescribe exámenes adicionales según el diagnóstico que sugiera. Para un diagnóstico preciso realizar:

  • Pruebas de laboratorio— hemograma completo, análisis bioquímico de sangre, análisis general de orina, pruebas para detectar infecciones, enfermedades autoinmunes.
  • Electroneuromiografía- estudio de la conducción de impulsos a lo largo de las fibras nerviosas, que permite determinar con precisión la ubicación de la lesión en trastornos neurológicos.
  • Imágenes mediante radiografía, tomografía computarizada (CT), resonancia magnética (MRI), que ayudará a ver todas las estructuras de la columna vertebral, la presencia de hernias, compresión de las raíces de los nervios espinales.
  • Ultrasonografíariñones y cavidad abdominal: se lleva a cabo si se sospecha patología de los órganos internos.
  • Evaluación del estado óseo: densitometría - con sospecha de osteoporosis, gammagrafía ósea - con lesiones malignas.

Si el médico está absolutamente seguro de que el dolor lumbar no es específico, puede prescribir un tratamiento basándose únicamente en el examen, sin pruebas adicionales.

A menudo, con dolor lumbar, una persona no consulta a un médico, sino que solo acude a una resonancia magnética de la columna por su cuenta. Este enfoque puede resultar confuso para el paciente: los estudios han demostrado que la mayoría de los adultos tienen hernias de disco asintomáticas. El paciente atribuye el dolor a este hallazgo de la resonancia magnética y no busca más atención médica. Como resultado, una persona sufre molestias durante mucho tiempo, toma analgésicos sin control y desarrolla complicaciones y efectos secundarios.

¿A qué médico debo contactar?

En primer lugar, si tienes dolor lumbar, también puedes consultar a un médico de cabecera. Él le sugerirá qué está causando el dolor y, en función de ello, le derivará a otro especialista. Puede omitir este paso e inmediatamente programar una cita con un neurólogo.

Si un neurólogo, tras un examen especializado, sospecha una patología fuera de la columna, puede derivar a:

  • reumatólogo,
  • cirujano,
  • urólogo,
  • gastroenterólogo,
  • endocrinólogo,
  • oncólogo.

Los médicos de todas estas especialidades se encuentran periódicamente con el síntoma del dolor lumbar, porque tiene una gran cantidad de causas posibles.

Si se ha establecido un diagnóstico de dolor mecánico, el paciente será tratado por fisioterapeutas, reflexólogos, fisioterapeutas y masajistas.

Cómo curar el dolor lumbar

  • CirugíaSe utilizan principalmente para los signos de compresión de la médula espinal o de las raíces de los nervios espinales, cuando el paciente experimenta paresia de una extremidad o trastorno urinario. Estos síntomas pueden ser causados por una hernia intervertebral, un tumor o una lesión. Además, se puede recomendar al paciente la consulta con un neurocirujano en caso de dolor crónico cuando el tratamiento conservador no es eficaz en 12 semanas. La decisión sobre la cirugía se toma sólo después de la visualización de la columna.

    Los estudios han demostrado que las hernias de disco no complicadas se pueden tratar con éxito sin cirugía utilizando métodos conservadores. Los programas de rehabilitación consiguen buenos resultados en el 90% de los pacientes con lumbalgia.

  • Tratamiento conservadorIncluye métodos medicinales y no medicinales.

    El tratamiento farmacológico se lleva a cabo con antiinflamatorios no esteroideos, que alivian el dolor y la inflamación, así como con relajantes musculares, que relajan los músculos.

    El tratamiento no farmacológico incluye:

    • Fisioterapia— tiene como objetivo eliminar rápidamente el dolor y la inflamación, así como acelerar la restauración de los tejidos y la relajación de los músculos. Los métodos más efectivos: terapia magnética, terapia con láser y terapia con ondas de choque.
    • Acupuntura- inserción de agujas estériles especiales en puntos biológicamente activos para reducir el dolor y relajar los músculos.
    • Masaje— mejora la movilidad de la columna y las articulaciones, promueve la distribución adecuada de la carga en los músculos de la espalda.
    • Terapia física- le permite relajar y fortalecer los músculos de la espalda. Los ejercicios son eficaces para el dolor de espalda tanto agudo como crónico.

    Si el paciente presenta dolor durante más de 12 semanas, hablamos de dolor crónico. En su tratamiento, a todos los métodos anteriores se añaden antidepresivos con efecto analgésico, así como psicoterapia cognitivo-conductual.

El reposo en cama no aporta beneficios en el tratamiento del dolor lumbar mecánico y no es una alternativa a los métodos anteriores. Además, se debe evitar en la medida de lo posible para el paciente. El reposo prolongado en cama provoca rigidez en las articulaciones, tensión muscular y ralentiza significativamente la recuperación.

Consecuencias

La lumbalgia aguda inespecífica tiene un pronóstico favorable. De quienes buscan tratamiento de inmediato, entre el 70% y el 90% mejoran en unos pocos días. La frecuencia de las recaídas depende del estilo de vida. En algunos pacientes, el dolor se vuelve crónico y dura más de 12 semanas, requiriendo tratamiento con antidepresivos con efecto analgésico. Si el dolor es causado por la compresión de las raíces de los nervios espinales por una hernia, puede ir acompañado de entumecimiento en las extremidades, así como problemas para orinar y defecar.

Prevención

Ayude a prevenir el dolor lumbar:

  • Ejercicio moderado durante 150 minutos por semana: caminar, nadar, ejercicios para los músculos centrales: abdomen, zona lumbar, suelo pélvico, muslos y glúteos.
  • Mantener un peso saludable.
  • Calienta cada 40-60 minutos con una posición estática prolongada.
  • Ejercicios de estiramiento de los músculos del muslo.
  • Posición correcta del cuerpo al levantar pesas: es necesario ponerse en cuclillas, no inclinarse hacia adelante.
  • Prevención de la disminución de la densidad ósea mediante la toma de calcio y vitamina D, diagnóstico precoz de la osteoporosis mediante densitometría. Esto es especialmente importante para las personas mayores y las mujeres posmenopáusicas.
  • Mantener la salud somática y psicológica general.